Tengo problemas con mi pareja por sus hijos | No sé cómo tratarlos
Índice de contenidos
¿Problemas con tu pareja por sus hijos? Entonces, has llegado al lugar indicado.
Cómo sabrás, los hijos anteriores a la relación son de las causas más comunes de problemas entre pareja. Sin el acercamiento indicado, la relación puede llegar a un punto de quiebre, en el cual no hay más opción que la ruptura amorosa.
Sin embargo, los hijos de tu pareja no tienen por qué ser tus enemigos. Para ellos, aceptar una nueva persona en sus vidas, especialmente luego de la ruptura de sus padres puede ser difícil. No obstante, puedes aprender a convivir con ellos de forma sana, e incluso crear lazos afectuosos.
¿Quieres saber cómo aprender a lidiar con ellos para fortalecer tu relación y brindarle estabilidad?
Dado que los problemas entre hijos y parejas son complicados y difíciles de manejar, he señalado algunos métodos para lidiar con ello; incluso sin asistir a terapia. Así, podrás entender mejor qué es lo que debes y no debes hacer para que tu relación no se vea perjudicada.
¿Qué origina los problemas con tu pareja por sus hijos?
En la mayoría de los casos, los hijos se muestran renuentes a aceptar a una nueva pareja para su madre o padre. Después de todo, aceptar que la relación de sus padres no puede continuar no es una tarea fácil.
Por otra parte, muchas exparejas tienden a condicionar a sus hijos. Como resultado, estos pueden ver a la nueva pareja –en este caso, tú–, como su enemigo.
Además, debes recordar que tanto la infancia como la adolescencia son periodos de aprendizaje y transición. Por ende, los cambios familiares son más difíciles de aceptar.
Teniendo en cuenta estos factores, podrá entender la perspectiva de los hijos de tu pareja, así como algunas de las causas de su rechazo hacia ti.
Desventajas de tener problemas con tu pareja por sus hijos
Si estás aquí, es porque ya tienes una idea de cuántas dificultades podrías enfrentar en esta situación. Sin embargo, siempre debes recordar hasta qué punto es importante solventar los lazos con los hijos de tu pareja.
Muchos individuos tienden a obviar estos problemas, e incluso esperar a que estos se resuelvan solos. No cometas el mismo error; ten en cuenta que esta situación podría:
- Debilitar los lazos afectivos con tu pareja: Tu pareja es quien sale más perjudicada en estas situaciones. Además, la falta de aceptación de parte de sus hijos podrían generarle falta de confianza, frustración, e incluso rencor. Como resultados, las discusiones y conflictos se vuelven parte de la vida diaria.
- Crear enemistades: Ser visto como el enemigo, o poner a los hijos como tal, sólo derivaría en montones de problemas. Sin mencionar que tendrías que lidiar con incontables situaciones incómodas, desagradables y poco placenteras con sus hijos.
- Hacer la vida en pareja casi imposible: ¿Imaginas tener que lidiar con esta clase de conflictos, ya sean grandes o pequeños, permanentemente? Lo cierto es que una relación sana no se prolongaría bajo estas circunstancias.
- Obligar a la ruptura: Si ves a los hijos de tu pareja como tu competencia, dile adiós a tu relación. Lo mismo ocurre si no logras establecer ningún tipo de conexión.
Entonces, ¿debo fingir que amo a los hijos de mi pareja, incluso si no es así? Al contrario, las falsas muestras de afecto sólo complicarán las cosas.
Si la convivencia no parece posible, puedes establecer acuerdos; no para buscar el amor incondicional, sino para poner fin a los problemas y mantener un trato respetuoso con los hijos.
¿Y cómo hacerlo? No te preocupes, tengo algunas sugerencias a continuación:
¿Cómo mejorar la relación con los hijos de mi pareja?
Debes recordar que los hijos buscan proteger a sus padres, incluso después de llegar a la adultez. Por ende, debes entender que, en la mayoría de los casos, sólo buscan cuidar a sus padres de posibles desilusiones.
Sabiendo el porqué de sus diferencias y sospechas hacia ti, podrás empezar a conectar con ellos. Así, podrás preservar el amor de tu pareja y quedar en buenos términos con sus hijos; incluso si no se llevan bien.
Ahora bien, veamos cómo puedes abordar esta situación:
- Date tiempo de conocerlos: Puede que no hayas creado vínculos con los hijos de tu pareja por malas primeras impresiones. Los prejuicios sólo sirven para poner barreras entre las personas; puede que no existan problemas reales entre ustedes y que lo que necesiten es conocerse abiertamente.
- Escúchalos: El hecho de escuchar demuestra interés y honestidad hacia las personas a tu alrededor. El sólo hecho de prestar atención y demostrarlo en tus acciones te ganará el respeto de los hijos de tu pareja. Además, podrás acercarte más a ellos y mejorar la convivencia.
- No entres en conflicto: Aunque las discusiones parezcan difíciles de evitar, debes saber mantener la calma, incluso ante los comportamientos más irracionales. Del mismo modo, debes respetar límites, no tratar de imponer tu autoridad y de ningún modo obligarlos a llamarte “mamá” o “papá”.
- Establece tu posición: Esto no quiere decir que debas proyectarte como la nueva figura de autoridad de la familia, sino que no debes ceder del todo para ganar respeto.
- Aboga por el bienestar de tu pareja: Sin importar qué tan grave parezcan las circunstancias, debes hacer lo posible por no causarle malestares a tu pareja.
He de acotar que estos consejos no darán resultados si no deseas llevarte bien con ellos.
Entonces, ¿cómo puedo acercarme a los hijos de mi pareja?
Debes preguntarle a tu pareja todo en cuanto a la personalidad de sus hijos. Después de todo, nadie puede conocerlos mejor.
Pregúntale directamente qué es lo que sus hijos disfrutan, qué les disgusta, cuáles son sus pasatiempos, cuáles son sus lugares preferidos, etc. Sabiendo esto, puedes determinar qué actividades podrían facilitar el acercamiento mutuo con los hijos de tu pareja.
Si sus hijos son jóvenes, las actividades a continuación les van a encantar:
- Salidas familiares: Ya sea al parque, a la playa, al restaurante, o al sitio que ellos prefieran. Eventualmente, puede que empieces a ganarte su afecto. Y de no ser así, al menos, dejarán de verte como su oponente.
- Hobbies compartidos: Si los hijos de tu pareja practican un pasatiempo o deporte que conozcas o que también practiques, tienes una excelente oportunidad para acercarte a ellos. Ya sean consejos, equipos, o experiencias, ellos lo apreciarán –pero no te entrometas demasiado si ellos no lo permiten.
- Compras: Los niños aman los regalos, por lo que sacarlos un día y para comprarles algunos detalles podría favorecerte. Sólo asegúrate de que ellos estén de acuerdo.
- Viajes: No es un secreto que los niños aman las aventuras. Además, estas pueden brindarte momentos especiales para olvidar los problemas y reemplazarlos por recuerdos satisfactorios.
Ten en cuenta que estas estrategias pueden no servir de mucho con hijos adolescentes y adultos. Entonces, ¿qué hacer?
En estos casos, la comunicación directa y sin rodeos es tu mejor aliada. Sin embargo, debes recordar que tu propósito no es enfrentarlos, sino conocer sus razones y forjar acuerdos de convivencia.
¿La terapia de pareja podría ayudar?
Por supuesto. Tanto la terapia personal como la terapia de pareja te ayudarán a manejar mejor los problemas con tu persona amada.
Los problemas con los hijos de tu pareja pueden ser difíciles de sortear, por lo que la perspectiva psicológica es primordial para salir adelante. Asimismo, la terapia infantil es fundamental si los hijos de tu pareja están atravesando momentos complicados, especialmente durante la adolescencia.
Recuerda que este periodo suele venir acompañado de cambios hormonales, conductas rebeldes, crisis emocionales; por ende, siempre deben disponer de la ayuda de un terapeuta, incluso si no afectan las relaciones de sus padres y sus parejas.
- Detalles
- Visitas: 17460